En diferentes etapas de mi vida he leído, porque me gusta hacerlo. No tengo un género en específico, leo lo que me gusta, lo que me interesa y lo que atrae mi atención. Y créanme cuando les digo que no solo se trata de libros, lo importante aquí es leer.
¿A que viene todo esto y que tiene que ver con un escritor?
Tiene todo que ver, toda persona a la cual le interese comenzar a escribir, primero que nada debe comenzar a leer. Si no lees, no podrás escribir, pues tendrás tu mano muy limitada.
Aclarado el punto, debo decir que todo lector debe saber que la lectura no es un hábito de todos, pues se necesitan al menos tres cosas:
1-Gusto por la lectura
2-Constancia
3-Tiempo
2-Constancia
3-Tiempo
¿Cierto?, estoy segura que muchos coincidirán conmigo. Expliquemos un poco.
1- Gusto por la lectura.
De que sirve comprar un libro o que alegría te puede causar que te regalen uno en tu cumpleaños si simplemente no te gusta leer.
Si no hay interés no habrá poder humano que te obligue a hacerlo. Además ¿a quien le agrada hacer algo que no le gusta?
Si no hay interés no habrá poder humano que te obligue a hacerlo. Además ¿a quien le agrada hacer algo que no le gusta?
Y, ¿como estás seguro de que no te gusta?, ¿Lo has intentado?
Por favor no seas de esas personas que hablan por hablar, o de esas que se dejan llevar e influenciar.
Sé auténtico y cuando digas no, no me gusta, o no quiero, lo cual es muy válido y es un derecho de toda persona, que sea porque realmente lo has probado o intentado pero sobre todo porque lo sientes.
2-Constancia
Supongamos que llega un día en que te entra la curiosidad por leer un libro que te han recomendado o tal vez viste la película y quieres saber si el libro es mejor como suele ser siempre y sin excepción.
Entonces compras el libro, lo pides prestado a un conocido o lo sacas de una biblioteca, entonces comienzas a leerlo, puede incluso que tu curiosidad sea tan grande que leas varios capítulos, pero llega un momento de la historia donde pierdes las ganas y comienzas a relegarlo, así hasta olvidarlo por completo.
Entonces compras el libro, lo pides prestado a un conocido o lo sacas de una biblioteca, entonces comienzas a leerlo, puede incluso que tu curiosidad sea tan grande que leas varios capítulos, pero llega un momento de la historia donde pierdes las ganas y comienzas a relegarlo, así hasta olvidarlo por completo.
¿Y nunca llegaste al final?
¡Es un crimen dejar un libro a medio leer!
Es como dejar un plato de comida medio lleno, una película a la mitad, una fiesta en pleno éxtasis, una tarea sin terminar o, una relación inconclusa.
¿Te das cuenta lo que eso significa para todo lo que tiene que ver contigo y tu vida? No es muy buena referencia. ¿Cierto?
He ahí la importancia de la constancia.
3- Tiempo
Algo que siempre me ha sorprendido cuando leo un libro, es como mi mundo parece detenerse pues me absorbe por completo, y cuando te das cuenta y volteas a ver el relój, han pasado horas sin que te dieras cuenta.
Bien, pongo esta pequeña observación porque definitivamente se necesita tomarse un tiempo para poder dedicarlo a la lectura. Y créanme que cuando en verdad hay ganas puedes valerte de todo tipo de mañas.
Bien, pongo esta pequeña observación porque definitivamente se necesita tomarse un tiempo para poder dedicarlo a la lectura. Y créanme que cuando en verdad hay ganas puedes valerte de todo tipo de mañas.
Por ejemplo, en estos tiempo donde el tráfico es el pan de cada día y donde el tiempo empleado para llegar a nuestros centros de trabajo o estudio son cada vez mayores, podemos hacer dos cosas, enfadarnos porque la persona que está a lado se ha dormido y está roncando, o no deja de mover los dedos respondiendo mensajes en el celular o tal vez simplemente traiga puestos los audífonos a todo volumen para de ese modo evadir las realidades. O, puedes llevar un libro contigo, el que sea, drama, ficción, comedia, historia, créeme que cualquiera alimentará tu intelecto y abrirá tu mente expandiendo tus horizontes. Entonces el viaje será relajado, y sentirás que el tiempo pasó tan rápido cuando te des cuenta de que has llegado a tu destino. Ves, invertiste un tiempo que para otros resultará ser tiempo desperdiciado, ¡en procurarte un gran hábito!
O bien cuando llegues a tu casa, cansado después del trabajo o de clases y tomas un baño para meterte a la cama y prendes el televisor para "según tú" relajarte, ¡no lo hagas! Mejor toma un libro y lee un capitulo, te aseguro que te resultará mejor.
¡No pongas excusas y decídete a ser un lector!, de lo que prefieras, todo cuanto leas te servirá como no tienes idea. Una persona que lee es una mejor persona en todos los sentidos. No importa si tienes un título universitario o no, si lees serás más sabio y estarás mejor capacitado para desenvolverte en la vida.
Además no hay nada más seductor que una conversación interesante. ¿No crées?
NOTA
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